Pemela Anderson no tiene remedio, cada vez se le tuerce más la boca, y se le hace más grande el escote.
Esta vestimenta se ha convertido ya en un uniforme para la rubia, que una de dos: o usa las camisas más chicas, o lo que va dentro se le hace más grande.
Aquí aparece en la inauguración de la Sapphire Gentlemen’s Club and Prime 333 steakhouse, en New York.
Esperamos conocer pronto el lugar de tan sofisticado nombre.
Las fotos, AQUI
Esta vestimenta se ha convertido ya en un uniforme para la rubia, que una de dos: o usa las camisas más chicas, o lo que va dentro se le hace más grande.
Aquí aparece en la inauguración de la Sapphire Gentlemen’s Club and Prime 333 steakhouse, en New York.
Esperamos conocer pronto el lugar de tan sofisticado nombre.
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