Reporta Terra desde Chile que está a punto de llegar a ese país la película basada en la popular obra de Dan Brown “Ángeles y Demonios”. La saga, que tiene como primera parte “El Código Da Vinci”, viene recargada de críticas a la iglesia católica y abre un flanco de discusión importante respecto de lo “oculto” que ésta tendría a lo largo de la historia.
Lo cierto es que desde que los libros aparecieron, y se convirtieron en Best Seller esta discusión se dio una y otra vez, y muchas veces el autor aclaró que había novelado ciertas situaciones y recreado otras, por lo que siempre defendió su obra como literatura y no como documento. Sin embargo, mucha gente creyó que al construir una historia citando hechos reales, el autor pensó destapar una realidad.
Es que esta polémica lo único que hace es envolver el actual producto cinematográfico con una expectación mayor. Sobre todo porque Ángeles y Demonios pretende hablar de una de las sociedades secretas menos conocidas y por ello más atractivas de la antigüedad: Los Iluminati.
La obra, tanto en cine como en el libro, muestra como protagonista a un especialista en simbología de Harvard, Robert Langdon (Tom Hanks) quien es contratado por la CERN (Organización Europea para la Investigación Nuclear) para investigar un extraño hecho ocurrido con uno de sus físicos: fue encontrado muerto con un misterioso símbolo grabado en el pecho, iconografía que representaba a la Hermandad de los Illuminati.
La información, AQUI
Lo cierto es que desde que los libros aparecieron, y se convirtieron en Best Seller esta discusión se dio una y otra vez, y muchas veces el autor aclaró que había novelado ciertas situaciones y recreado otras, por lo que siempre defendió su obra como literatura y no como documento. Sin embargo, mucha gente creyó que al construir una historia citando hechos reales, el autor pensó destapar una realidad.
Es que esta polémica lo único que hace es envolver el actual producto cinematográfico con una expectación mayor. Sobre todo porque Ángeles y Demonios pretende hablar de una de las sociedades secretas menos conocidas y por ello más atractivas de la antigüedad: Los Iluminati.
La obra, tanto en cine como en el libro, muestra como protagonista a un especialista en simbología de Harvard, Robert Langdon (Tom Hanks) quien es contratado por la CERN (Organización Europea para la Investigación Nuclear) para investigar un extraño hecho ocurrido con uno de sus físicos: fue encontrado muerto con un misterioso símbolo grabado en el pecho, iconografía que representaba a la Hermandad de los Illuminati.
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